El 12 de diciembre del 2013, la corte de lo criminal de Caleta Olivia de la provincia de Santa Cruz de Argentina fallo contra 11 trabajadores petroleros basándose en cargos falsos, mayormente relacionados con el alegado asesinato de un policía ocurrido hace seis años. Tres trabajadores fueron sentenciados a prisión perpetua por el alegado “homicidio agravado”: Inocencio Cortez, José Rosales y Hugo González. Cuatro compañeros mas fueron sentenciados a cinco años de cárcel, y uno, un menor durante los alegados eventos, se encuentra en espera de una vista del sistema de justicia juvenil. Los trabajadores sentenciados se encuentran en libertad debido a su apelación de las sentencias. Queda muy poco tiempo para desperdiciar; es necesario montar un serio movimiento solidario para exigir que estas sentencias sean desestimadas.
Este caso consiste de una descarada fabricación de principio a fin, repleto de orificios y inconsistencias, basándose de “investigaciones” tipo GESTAPO. A nadie se identifica como el que dispara contra el policía, y nunca se produce el alegada arma del homicidio. De hecho no se ha producido ni una pizca de evidencia objetiva que conecte físicamente a ninguno de los trabajadores en cuestión a la muerte del policía – José Sayago. Con un descarado desprecio de las normas legales, el procurador hasta admitió abiertamente que los policías habían detenido y torturado a varios trabajadores que habían arrestado posterior a la muerte de Sayago, como parte de su proceso de construcción del caso.
Estos hombres eran empleados por la petrolera REPSOL, una transnacional española. Ellos exigían justicia sobre una cantidad de asuntos – que incluían paga igual por igual trabajo y una reducción de las altas tasas contributivas que le han impuesto a los salarios obreros en Argentina. La utilización de trabajo de baja paga tercerizado o externalizado y la pesada carga contributiva de los salarios obreros han sido dos componentes principales de los ataques anti-obreros llevados a cabo por el gobierno argentino. Similar al capitalismo en crisis en todas partes, el gobierno argentino ha tratado de resolver la crisis económica sobre los hombros de la clase trabajadora y las masas pobres. En realidad, estos trabajadores fueron víctimas de esta fabricación de casos por el estado argentino debido a que llevaban a cabo una lucha militante y inspiradora que le hacía frente a asuntos que son radicalmente importantes para nuestra clase.
Santa Cruz es la provincia de la cual provienen el extinto Presidente Néstor Kirchner y la presente Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, su viuda. La decisión del tribunal fue tomada por tres jueces ya que en Argentina no se utiliza el sistema de jurados. Es ampliamente reconocido que se ejercieron fuertes presiones contra los jueces en este caso, que han estado durante mucho tiempo íntimamente conectados a los Kirchners y al partido político dominante, el Partido Justicialista (peronista). Seria escasamente una coincidencia que los trabajadores recibieron estas sentencias que sirven exactamente los intereses de la clase capitalista argentina y sus amos imperialistas. Al desplomarse el capitalismo argentino, han surgido mas círculos de resistencia entre los obreros y juventud militante. Las escandalosas condenas de estos trabajadores son unos ejemplos extraordinarios de la criminalización de la protesta que se ha convertido en tendencia importante en Argentina como en el resto del mundo. La clase dominante del sistema capitalista tiene un gran interés en aplastar la resistencia obrera. Y los trabajadores de todas partes estamos interesados en hacer todo lo posible para construir la solidaridad internacional.
El alzamiento de los petroleros de Las Heras comenzó en diciembre del 2005, con movilizaciones de trabajadores cesanteados exigiendo nuevos empleos de la REPSOL. La lucha se extendió a los petroleros que aun estaban trabajando, tanto a los permanentes y a los tercerizados, con sus sueldos que solo alcanzaban el 60% de los anteriores. Se lanzaron a la huelga utilizando tácticas que incluían el corte de rutas y la ocupación de los talleres de la empresa.
Pero los trabajadores se vieron obligados a enfrentar a la policía local y a la Gendarmería Nacional, enviada por el gobierno federal. Tanto el gremio de los trabajadores tercerizados como el gremio establecido de los petroleros de REPSOL están ligados al régimen del gobierno peronista y no hicieron absolutamente nada para apoyar la causa de los trabajadores o defenderlos contra los ataques de los guardias locales y nacionales.
De una población de sobre 9,300 personas en Las Heras, tanto como 1,000 se congregaron en las calles en diferentes ocasiones. Dada la valentía de su lucha y el sólido apoyo que recabaron de la comunidad, los huelguistas fueron capaces de alcanzar algunas de sus demandas. Entonces el 10 de febrero del 2006, los guardias arrestaron al dirigente huelguista, Mario Navarro, mientras daba una entrevista a una emisora radial de la localidad, obviamente con la meta de decapitar la resistencia popular. Después de llevarse arrestado a Navarro, cientos de trabajadores rodearon el edificio municipal demandando que se soltara a Navarro. En la confrontación que se dio, hubo varios heridos. En cuanto al policía Sayago todo lo que se sabe con certidumbre es que herido de bala y murió al par de horas.
Fue a partir de ese momento que la policía y los gendarmes pasaron a hacer redadas de hecho tratando a toda la comunidad como una zona militarizada. Violaron la privacidad de los hogares, sacaron arrastrados a los inquilinos sin siquiera identificarse y golpearon a los detenidos hasta que “testificaran” quienes eran los alegados “cabecillas” que habían ultimado a Sayago y cometido otras ofensas.
Es notable que la policía no siguió ni siquiera la pretensión de una rutina forense. No establecieron un cordón de seguridad alrededor de la escena del crimen para proteger la evidencia, acción que condujo a muchos sospechar que los policías escondían su propia participación. De hecho, hasta el propio cura católico local denominó este episodio completo como una “caza de brujas”. Los “testigos” que habían sido obligados a hacer declaraciones las repudiaron como extraídas bajo coacción y tortura por la policía. Al salir esta verdad en el juicio, el procurador escribió en el alegato que entrego al tribunal que “Darle un cachetazo o ponerle una bolsa en la cabeza [a un testigo] no implica decirle lo que debe declarar”
La mayoría de los argentinos en el presente consideran con horror a la dictadura militar que domino su país del 1976 al 1983. Mientras que el retorno a la democracia burguesa a la Argentina fue obviamente bienvenido, claramente no ha significado el fin de la represión, el logro de la verdadera justicia social o seguridad económica para la masa de la gente. En las áreas empobrecidas, la policía mata con impunidad a jóvenes que son fácilmente denominados “criminales”. Ese es el método de “gatillo fácil” de los policías reservado sobre todo para la juventud pobre oprimida. Los trabajadores que resisten contra los ataques capitalistas también enfrentan la represión y matonería estatal. Los trabajadores como Cortez, Rosales y González cuyo caso hemos descrito aquí, fueron mantenidos en detención “preventiva” durante tres años y fueron dejados en libertad solo en el 2009 debido a que esa era la máxima encarcelación que el estado puede obligar sin una vista judicial.
Junto a la violencia sin sentido que desató el estado sobre la comunidad de Las Heras, esta situación es considerada el peor episodio de este tipo desde los finales de la dictadura militar hace 30 años. La creciente crisis económica en la Argentina y los concomitantes ataques gubernamentales contra los trabajadores, los pobres y inmigrantes, junto a la creciente capitulación al imperialismo, augura más ataques como los de la calle y las cortes, no solamente en Santa Cruz sino a través del país. En nuestra visión, esta realidad señala hacia la absoluta necesidad de una alianza ponderosa entre la clase trabajadora y todo pueblo oprimido. Mediante las luchas unificadas, nuestra clase tiene el poder para construir una defensa contra los ataques del presente y atraves del tiempo nuestra clase tendrá la habilidad para construir el partido revolucionario que podrá dirigir la lucha contra el sistema capitalista en su conjunto.
El veredicto y las sentencias de este caso fueron recibidos por una ola de protestas en Santa Cruz y Buenos Aires. Algunos gremios han llevado a cabo actividades como también muchas organizaciones identificadas como socialistas, incluidas el Frente de Izquierda y de Trabajadores (una coalición electoral de los tres grupos principales: Partido Obrero, Partido de los Trabajadores Socialistas y la Izquierda Socialista). Varios grupos de derechos humanos y muchos otros también han llevado a cabo actividades.
El enfoque que favorecemos consiste en una gran campaña nacional para defender a estos trabajadores y urge a todas las federaciones gremiales poderosas (de las cuales existen 5 en la Argentina) a unirse y construirla a través de la movilización de las masas. La campaña también va dirigida a obtener serios beneficios para todos los trabajadores y crear la oposición a la creciente represión y medidas policiacas estatales mostradas en los eventos de Las Heras.
Los trabajadores y gremios de EE.UU., como las organizaciones juveniles y estudiantiles y todos los grupos de derechos humanos y justicia social, deberán unirse a nuestros compañeros/as argentinos en la defensa de los trabajadores de Las Heras.
Algunos artículos, la mayoría de la Izquierda argentina y en español, le podrán ser útiles a los que deseen verificar el desarrollo pasado y futuro de este caso.
“ ‘Una sentencia aberrante’”, Partido Obrero
“Condenas por el caso de Jorge Sayago”, www.pagina12.com
“Solidarity with the petrol workers of Las Heras (Argentina)”, www.marxist.com
“José Rosales, condemned worker of Las Heras” (youtube video)
“COMISIÓN DE TRABAJADORES PROCESADOS, FAMILIARES Y AMIGOS DE LAS HERAS – YouTube”
“A todas las organizaciones obreras, estudiantiles y organismos de DDHH”, www.agenciacta.org
“Outcry Over Conviction of Oil Workers for Policeman’s Murder,” www.argentinaindependent.com