Boletín de la Liga para el Partido Revolucionario (LRP), con respecto a SEIU Local 32BJ, 20 de diciembre 2007


¡No más traiciones!

¡Aumentos salariales sustanciales o nos lanzamos a la huelga!

¡Cero despidos! ¡Por mejores planes de salud y pensiones!
¡Cero recortes o concesiones!
¡Fin al sistema de esclavitud del estamento inferior para los trabajadores nuevos!

La presión contra el presidente de la unión Local 32BJ Mike Fishman y el resto del liderato de la Local continúa aumentándose. Esta gente nos traiciono en las dos últimas negociaciones del convenio al no organizar la huelga, aceptando descaradamente las exigencias de los patronos y condenándonos a salarios bajos y otras concesiones. Como resultado de estas traiciones, nuestros salarios han descendido más y más ante el golpe de los incesantes aumentos del costo de la vida. Pero ahora, los miembros de la unión reclaman a viva voz que no lo aceptarán más, y reivindican un aumento sustancial de sus salarios.

La semana pasada miles de limpiadores y porteros marcharon en Manhattan demostrando que están listos para dar la lucha contra los patronos para obtener un convenio más justo. El pedido a la asamblea sindical de la autorización del voto de huelga si la situación lo amerita hecho por Fishman recibio el mas amplio apoyo de la masa de trabajadores. Pero muchos todavía recuerdan la derrota de nuestra última huelga en el 1996 y no están tan confiados que Fishman y sus compinches vayan a liderar la muy necesaria huelga hacia la victoria.

En realidad, el historial de lucha de Fishman nos demuestra que el no ha tenido intenciones de convocar huelgas algunas, por el contrario, siempre ha estado presto a traicionarnos una y otra vez. Después de todo, este individuo ha recibido autorización para convocar la huelga durante las dos últimas negociaciones de convenios y solo se ha rendido ante los patronos sin dar la pelea cada vez.

Es por esta razón, que trabajadores simpatizantes de la Liga por el Partido Revolucionario se han unido con sus compañeros de la Local 32 BJ para promover una moción en la asamblea que hubiese obligado a Fishman y compinches a convocar una huelga para alcanzar nuestras demandas. Para impedir tal importante moción al igual que cualquiera otra discusión democrática por los miembros de la unión, Fishman eligió de forma traicionera tener su "farsa autorización de voto de huelga" en una concentración en la calle en vez de en una asamblea de discusión masiva. Ahora solo la presión de los miembros de la unión destinada a que Fishman y sus compinches se atemoricen de perder sus posiciones privilegiadas a la cabeza de la unión podrá obligarlos posiblemente a organizar una lucha más fuerte en el presente.

Fishman dijo “No hay excusa para retrasarnos”

A principios de esta ronda de negociaciones Fishman declaró:

“Ha llegado la hora para devolverle los salarios a los trabajadores debido al ascendente costo de la vida en Nueva York. ... Con la bonanza que disfruta la industria de bienes raíces, no existen excusas para retrasar los incrementos de salario real que estos trabajadores y trabajadoras que laboran tan fuerte merecen y necesitan para lograr sobrevivir en Nueva York.” (Declaración de prensa de la 32BJ, 24 de octubre).

¡No hay excusa, por cierto!

El problema consiste en que Fishman ha dicho lo mismo al comienzo de las negociaciones del convenio de los trabajadores residenciales de la Local 32BJ el año pasado, solo para rendirse ante las exigencias de la Junta Consultiva de Bienes Raíces (RAB), de los patronos de bienes raíces – con sus aumentos salariales inferiores a la tasa de inflación. Sin si siquiera tratar de organizar una huelga victoriosa, Fishman encadenó a los trabajadores a un congelamiento de salario durante 6 meses y unos “aumentos” promedio de 2.1% al año – menos de la mitad del 4.8% del incremento en el costo de vida en Nueva York el año anterior (New York Times, 22 de abril y 15 de junio 2006).

En un intento por encubrir su traición, Fishman pretendió declarar como una mejoría a la compensación general de los trabajadores - los dineros adicionales al fondo del plan medico hecho por patronos. Pero la realidad fue que los patronos estaban previamente comprometidos a dar los fondos para el plan de salud de los trabajadores, sin importar en cuanto subiera los costos. La parte nueva mas importante del convenio fue una concesión masiva departe de la unión: Por vez primera se declaro un límite a cuanto los patronos tendrían que contribuir al plan de salud de los trabajadores.

Si estas son las maneras como Fishman vendió a los trabajadores residenciales el año pasado, ¿porque debemos ahora esperar algo diferente de su parte?

La verdad es que Fishman y compinches nos han golpeado con convenios malísimos año tras año. Mientras que los líderes sindicales deben luchar para mejorar las condiciones de trabajo y salariales de los trabajadores, Fishman y compinches han aceptado recortes de los salarios reales en cada convenio que han negociado. También han aprobado cambios en los convenios que les facilitan a los patronos despedir a los trabajadores y hasta han aprobado la “investigación patronal de antecedentes penales” que amenaza directamente a los inmigrantes indocumentados con la perdida de sus empleos.

Fishman prepara otra traición

En realidad Fishman da señas de su disposición a vendernos otra vez. Como lo ha reportado el New York Times:

La unión ... ha insertado un gran signo interrogativo dentro de la negociación al anunciar que no le dirá a los negociadores patronales que tan alto es el aumento que desea hasta el 27 de diciembre, cinco días antes del vencimiento del convenio.

No existe ninguna razón suficientemente buena para que Fishman y compinches mantengan las demandas salariales en secreto. Si estuviesen realmente preocupados por luchar por las necesidades de los trabajadores, ya hubieran anunciado la exigencia salarial de la unión y a su vez, estuvieran movilizando las bases de la unión Local 32BJ para alcanzar la fuerza necesaria para lograrla.

La única razón que Fishman y compinches no están anunciando la demanda salarial, se debe a que ya han planificado traicionarnos. No están seguros precisamente que tan malo va a ser la misma. Necesitan hablar con los patronos a puertas cerradas para tratar de calcularlo. Fishman y compinches esperan resolver lo básico secretamente en un acuerdo contractual con los patronos antes de anunciar una demanda salarial falsa. De esta forma pretenden anunciar un acuerdo contractual a último momento con un “aumento” salarial muy cerca de lo mejor que ellos piden para luego decir que esto fue lo mejor que pudieron obtener mientras evitan la huelga.

¡Nosotros no podemos permitir que Fishman nos venda de nuevo! Tendremos que recordarle sus propias palabras: No hay excusa para retrasar los incrementos del salario real. Y si los patronos de la RAB no están de acuerdo en darnos un aumento salarial alto, por encima del nivel de inflación, para el tiempo de caducidad de nuestro convenio a la medianoche del 31 de diciembre, ¡no hay excusa para no convocar la huelga!

Para oponernos a tal traición, debemos exigirle a Fishman y compinches a que se comprometan ya a una demanda salarial específica y debemos ser claros: cualquier exigencia salarial anual menor al 5% significa un recorte al salario real de acuerdo a las cifras oficiales de la inflación para la ciudad de Nueva York. ¡Por un aumento salarial mas alto que la tasa de inflación anual!

En realidad, reconociendo que hay una amenaza de un incremento al costo de la vida en los años venideros, nosotros debemos extender el llamado para que la unión luche y obtenga un Ajuste Real al Costo de Vida (COLA) que automáticamente eleve nuestros salarios a pasos con la inflación. De esa forma, por cada 1% de incremento en el costo de la vida, nuestros salarios se incrementarán en 1%. Ya tenemos la COLA pero sólo entra en efecto cuando la inflación sube por encima del 6%. Y solo entonces nos recompensa a nosotros con una fracción pequeña de la perdida del salario real.

Fishman espera canjear otras concesiones por un aumento salarial que aceptemos a sus instancias. Por lo tanto, debemos exigir: ¡Cero recortes o concesiones! También tenemos que exigir el fin del estamento inferior para los trabajadores nuevos – con salarios más bajos, con protecciones laborales mas débiles y menores beneficios – ¡Ponerle fin al sistema de esclavitud del estamento inferior de los trabajadores nuevos! Debemos exigir la terminación a las investigaciones de antecedentes penales que persigue a los inmigrantes indocumentados. ¡Y debemos luchar por una cláusula de cero cesantías así como también por un plan de salud y beneficios de pensión aumentados sin incrementos en pagos de parte de los trabajadores!

Las Lecciones de la Huelga del 1996

Un arma que Fishman y compinches utilizan para obligarnos a aceptar sus horribles convenios es la memoria de la huelga del 1996. Todos los que pasamos por aquella huelga recordamos el dolor de la derrota. Pero no tuvimos que perder la huelga del 1996 – aquello fue la culpa del liderato burocrático encabezado por el entonces presidente de la 32BJ Gus Bevona. Al aprender certeramente las verdaderas lecciones de la huelga del 1996, ¡podremos lanzarnos de nuevo a la huelga y vencer!

En el 1996 la dirección de Bevona y sus compinches convocaron la huelga sin ninguna preparación previa. Para entonces abandonarnos. Pero nosotros nos mantuvimos fuertes; manteniendo nuestras líneas de piquetes durante la huelga aun bajo temperaturas congeladas y confrontando ataques continuos de la policía quienes golpeaban y arrestaban a los huelguistas y escoltaban manadas de rompehuelgas al interior de los edificios a trabajar.

Pudiéramos haber extendido la huelga a otros trabajadores bajo ataques de los patronos. Hubiéramos obligado a nuestros líderes sindicales apelar a otras uniones a unirse a nuestra lucha, con protestas masivas hubiéramos señalado el camino hacia una huelga general por mejores salarios, condiciones de trabajo y empleos para todos. ¡Se hubieran aterrorizado los patronos y políticos!

Pero por el contrario, Bevona y compinches nos mantuvieron débilmente aislados. Contra todas las probabilidades, nos mantuvimos luchando por más de un mes hasta que los líderes de la unión finalmente se rindieron. Acordaron con los patronos un convenio podrido con recortes masivos incluyendo un estamento inferior de los trabajadores nuevos a nivel de superexplotación, de segunda clase, con salarios más bajos, menos protección laboral y un periodo de espera mucho mas largo para recibir los beneficios completos.

Desde entonces sólo hemos visto como nuestros salarios y condiciones de trabajo empeoran– sin nosotros utilizar el recurso de la huelga. ¡Es tiempo para que nos repongamos de una década de derrotas y nos preparemos para contra-atacar, para golpear a los patronos y vencerlos!

¡No más Traiciones!

Unidos en la lucha, los 26,000 limpiadores, porteros y operadores de elevadores de la Local 32BJ podemos parar colectivamente y obtener un aumento salarial sustancial, por encima de la tasa de inflación, al igual que otras mejorías, y con cero recortes o concesiones.

Mas importante aun, el resto de la clase trabajadora de la ciudad de Nueva York siente la presión de bajos salarios y mas duras condiciones de trabajo y seguramente apoyaran a la Local 32BJ si golpeamos a los patronos. Si nuestra unión hace esfuerzos reales para extender nuestra huelga a otros sectores de la clase trabajadora, los patronos cederán ante nuestras demandas rápidamente.

Pero los trabajadores más militantes tendrán que empezar a unirse inmediatamente para prepararse en oposición a cualquier intento de Fishman y compinches para traicionarnos.

En el curso de esta lucha que proponemos, nos veremos obligados a discutir y tomar acuerdo sobre que clase de liderato nuevo nuestra unión y la clase obrera necesita urgentemente.

¿Porque lideres como Fishman se venden?

Después de habernos traicionado en el 1996, Bevona y sus compinches fueron ampliamente odiados por la matricula de nuestra unión. Ese odio se profundizo al salir a la luz pública la escandalosa corrupción financiera de esa camarilla. El odio y desconfianza generalizada de la matricula hacia esta camarilla significaba que ni los lideres de la Internacional SEIU, ni los jefes de la RAB, podían depender de Bevona y sus compinches para mantener su control patronal acostumbrado sobre la matricula de la Local 32BJ. Por consiguiente, el sindicato Internacional tomo control sobre la unión local, ¡pero no antes de que a los corruptos de Bevona y sus compinches les fueran entregados millones de dólares en desembolsos del dinero de nuestras cuotas!

Fishman fue finalmente instalado como presidente de la unión Local por el presidente de la SEIU Internacional Andy Stern. Fishman no es tan monstruosamente corrupto como Gus Bevona. El numero l y sus compinches son “justamente” corruptos en la manera que es típico de burócratas sindicales en este país.

Rechazando llamados para que los líderes sindicales no ganen salarios más altos que los trabajadores que ellos representan, Fishman y compinches se aseguran de que ellos sean pagados generosamente con salarios cercano a o mas de $200,000 anuales, al igual que muchos beneficios extras. Pero lo más importante es que en la realidad su poder y privilegios emanan de su posición de negociadores entre los trabajadores y los patronos. Una lucha intransigente por los intereses de los trabajadores a pesar de los motivos de ganancia de los patronos pondría por consiguiente en peligro sus posiciones en la burocracia sindical. En cambio, sus funciones dependen en que nos mantengan a nosotros sometidos mediante componendas a cuartos oscuros con los patronos.

De esta forma, burócratas sindicales, como Fishman y compinches están atados al sistema capitalista del cual los trabajadores somos víctimas. Se oponen a cualquier demanda o lucha que pueda amenazar al sistema. Por eso los burócratas están siempre dispuestos a traicionar los intereses de los trabajadores cuando los patronos están en aprietos.

En estos momentos los jefes de la RAB registran grandes ganancias provenientes de las bienes raíces en la ciudad de Nueva York. Fishman y compinches se sienten bajo presión para declararse sobre cualquier aumento salarial por encima de la tasa de inflación. Pero como el resto del sistema sindical burocrático, ellos están también enterados de que el resto de la clase capitalista no está gozando de ganancias tan altas y estos no pueden darse el lujo de permitirse un masivo aumento de las luchas de los trabajadores.

De hecho, los jefes de la misma RAB están muy nerviosos acerca del futuro. Como el New York Times (11 de diciembre) reportase, el consultor de la RAB, Paúl Salva cito los problemas de la bolsa de valores de “Wall Street”, la crisis hipotecaria, y el nerviosismo de la economía del país como evidencia de como los patronos “podrán estar enfrentando un período muy tormentoso y agitado” y se verán obligados a resistir llamados por salarios mas altos. Fishman y sus compinches, como el resto del sistema sindical burocrático, no ven ninguna alternativa al sistema capitalista de explotación y ganancias. Por consiguiente, ellos inevitablemente traicionaran nuestros intereses siempre y cuando los mismos choquen con los de los capitalistas. El problema es que los intereses de la clase obrera siempre chocan con los capitalistas y estos solo se tornan peor en la medida que la crisis capitalista se profundice.

¡A construir un liderato revolucionario socialista!

El único líderato obrero con el cual se puede depender para adelantar nuestra lucha independiente a las consecuencias para los capitalistas es uno que este comprometido con el derrocamiento del capitalismo.

El capitalismo se desliza más profundamente por el abismo de su propia crisis, tanto aquí como en el exterior. La crisis hipotecaria y la amenaza del colapso de los mercados de acciones son síntomas de la crisis global en la producción de ganancias. Como respuesta, los capitalistas buscan intensificar su explotación de los trabajadores de todas partes. Precisamente esto es lo que esta detrás de la invasión norteamericana a Irak– para asegurarse la gran riqueza petrolera de aquel país y además dominar al Medio Oriente. Y esto también esta detrás de la intensificación de los ataques contra los trabajadores aquí en los Estados Unidos; tanto económicamente como mediante la intensificación de los ataques racistas contra Negros, Latinos e inmigrantes.

Pero el capitalismo ha creado las bases para su propia destrucción. Al desarrollar una economía mundial con gigantescas fuerzas productivas, el capitalismo ha creado la base tecnológica para producir la abundancia que la humanidad necesita para sus necesidades. No es necesario prolongar por más tiempo la existencia de los que tienen y los que no tienen, de los explotadores y de los explotados. Un mundo de abundancia y libertad es posible.

El problema consiste en que la propiedad de la economía se mantiene en las manos de capitalistas que limitan la producción a lo que solo les provee ganancias a ellos. La clase capitalista de cada pais gobierna a los trabajadores con la ayuda de sus estados armados de soldados y policías.

Para terminar el ciclo capitalista de guerras y opresión, la clase obrera tendrá que levantarse, derrocar a los capitalistas y tomar el poder estatal por cuenta propia. Entonces la clase obrera podra empezar a construir una sociedad socialista, sin clases. Tal socialismo genuino no tendrá nada que ver con los estados estalinistas opresivos que han gobernado a los trabajadores en nombre del socialismo pero que en la realidad solo los explotan de la misma manera que los capitalistas occidentales.

Como los ataques capitalistas se intensificarán, serán inevitables luchas masivas – cada vez mas masivas por los trabajadores y oprimidos. Las luchas, como la lucha por nuestro convenio, podrán rechazar los ataques durante algún tiempo y aun lograr conquistas. Pero más importante aun, a través de estas luchas la propia clase obrera va a recobrar el sentido de su tremendo poder. Alcanzado ese nivel de auto percepción, más y más trabajadores verán que la revolución socialista no es un sueño de pajaritos preñados, sino algo muy posible y muy necesario.

Pero en estos momentos, los trabajadores más previsores, con mayor conciencia de clase, deben juntarse para construir su propio partido político revolucionario que sea capaz de dirigir nuestras luchas inmediatas hacia la victoria y señalar el camino hacia lo que es inevitablemente la única solución: la revolución obrera socialista. Nosotros alentamos a todo trabajador interesado en nuestras ideas a contactarnos. ¡No hay tiempo que perder!