Para este tiempo el año pasado, 135 trabajadores principalmente inmigrantes de la fabrica de galletas Stella D’oro del Bronx – organizados en la Local 50 Bakery, Confectionery and Tobacco Workers and Grain Millers International Union (BCTGM) – se lanzaron a una huelga que duró casi once meses. Los trabajadores se mantuvieron firmes contra las exigencias del patrono que exigíarecortes sustanciales de salarios, beneficios de salud y en otras cláusulas contractuales. La huelga finalizó cuando un juez de la Junta de Relaciones del Trabajo (JNRT) falló contra los Brynwood Partners, los dueños de la fábrica, exigiéndole que los huelguistas regresaran a trabajar bajo el viejo convenio sin los recortes. La patronal se abrió al retorno de los trabajadores el 7 de julio pero la lucha entonces entró inesperadamente a una etapa más aguda aun.
La Brynwood no únicamente apeló al dictamen de la JNRT sino que mostró su carta escondida: anunciando que iba a vender las operaciones de la Stella D’ Oro en Octubre. Lo más probable es que su plan consiste en venderla a un comprador que se llevará el negocio a otro estado tras trabajadores de menor paga. Y si no lo logra, cerrará la fábrica y venderá sus activos. De cualquier modo, la meta principal de la compañía consiste en aplastar la resistencia obrera organizada a sus demandas.
Si se le permite a la Brynwood cerrar la planta – seria un duro golpe para estos trabajadores organizados y sus familias. Una derrota para los trabajadores de Stella D’oro alentaría a otros patronos a inmediatamente aumentar sus esfuerzos para romper los gremios y llevar acabo una ofensiva general contra los salarios y condiciones de trabajo de todos los trabajadores, unionados y no-unionados por igual.
Los huelguistas de la Stella D’oro han sido un vivo ejemplo para todos los trabajadores de la necesidad de unidad en la acción; ¡eso es sin mencionar que ningún unionado cruzó la línea de piquetes!Pero mientras la matricula se mantuvo leal a la huelga –hubo problemas fundamentales en como los principales dirigentes de la unión conducieron la huelga. Debemos sacar y señalar las lecciones claves si es que los trabajadores de la Stella D’oro serán exitosos y pasen a un nivel de lucha mas elevado.
Mas importante aun, fue una necesidad critica para la huelga haberle puesto un alto a los rompehuelgas. La Local 50 sola no tenía la suficiente capacidad para parar los esquiroles. Pero sin embargo los dirigentes gremiales fallaron al no movilizar el apoyo adicional necesario del resto del movimiento obrero para fortalecer las líneas de piquetes y mantener a los esquiroles fuera de la fábrica. Los oficiales de la Local 50 podían haber solicitado apoyo masivo a las uniones de la ciudad – y complementado sus pedidos oficiales con visitas organizadas de los trabajadores de la Stella D’oroa las matriculas de las uniones con llamados a la solidaridad activa. Protestas en otras ciudades organizadas por las uniones y otras organizaciones pro obreras y pro inmigrantes le hubiese impreso mas fuerza a la lucha.
Los dirigentes de la Local 50, como los de la unión internacional BCTGM no llevaron acabo estas gestiones. En vez de intentar romper el aislamiento de la lucha a partir de lo que sucedía exclusivamente en la fábrica, aceptaron esas limitaciones a la lucha de los huelguistas. Y el resto de los dirigentes de las uniones de la ciudad se dejaron llevar por lo que hicieron los oficiales de la unión local e internacional. Esta situación condenó a los trabajadores de Stella a una larga y dura lucha durante la cual los trabajadores estuvieron obligados a ver a los esquiroles rompehuelgas entrar y salir como Juan por su casa durante largos meses.
Los dirigentes sindicales generalmente gozan de posiciones privilegiadas como mensajeros muy bien renumerados que bregan con la patronal mientras las matriculas las mantienen como observadores pasivos. La burocracia laboral se agarra fuertemente al accionar dentro de los límites capitalistas y dependen de unas relaciones amistosas con el Partido Demócrata. Aun ahora, cuando la crisis general significa cesantías y cierres de negocios a través del país, los dirigentes sindicales continúan evitando las huelgas y otras acciones donde los trabajadores inevitablemente serian capaces de salir de su control burocrático. Estos generalmente temen la movilización independiente de la clase trabajadora. En este caso se convocó la huelga pero los dirigentes de la Local 50 les advirtieron a la matricula que estarían sujetos a la decisión favorable de la Junta Nacional de Relaciones del Trabajo y el llamado a un boicot de consumidores en vez de luchar para movilizar una lucha obrera mas amplia.
La JNRT fue diseñada para mantener la paz laboral – para asegurarles las ganancias a los capitalistas de sus operaciones.En ocasiones concede fallos parcialmente favorables a las uniones. En este caso, la Local 50 tuvo suerte debido a que el fallo de la JNRT les permitió a los huelguistas retornar a sus puestos de trabajo. Tal fallo no se podía garantizar, y el fallo mismo no garantizó que la Local 50 obtendría un buen convenio con seguridad de empleo. ¡Podemos ver claramente en los eventos subsiguientes que lo opuesto es cierto! El resultado final de una lucha entre cualquier sector de la clase capitalista y la clase trabajadora depende de si los trabajadores son capaces de desplegar suficiente poder para que los patronos le teman a las consecuencias de no concederles las demandas obreras. En este caso, el retorno de los trabajadores de Stella a su planta significa que a esta lucha se le ha proveído una última oportunidad para mostrar su fuerza total y ser exitosa.
Ante nosotros quedan dos meses valiosos para organizar la lucha que salvará los empleos en la Stella D’oro. Los sentimientos de simpatía y solidaridad con los trabajadores de Stella D’oro abundan en la ciudad. Apoyados por otros trabajadores, los trabajadores de Stella D’oro están obligados a encontrar diversas maneras para invocar la acción solidaria activa a masas mayores de trabajadores. No se puede malgastar mas el tiempo. Una respuesta de urgencia mayor es necesaria para ponerle un alto a la sentencia a muerte que los Brynwood Partners le han impuesto a esta lucha.
El viejo dicho, “Unidos vencemos, desunidos seremos derrotados” tiene que ponerse en practica en el presente. La lucha mas fuerte y amplia tiene que desplegarse. Los trabajadores más militantes están obligados a convencer a sus compañeros trabajadores a exigirle a las uniones a que inviertan la totalidad de sus recursos en la lucha para salvar los empleos y salarios de los trabajadores de Stella D’oro: ¡Cero cesantías, cero concesiones, cero cierres!
Los trabajadores de la Republic Windows en Chicago se enfrentaron a una compañía cuya meta consistía en mudarse a otro estado para montar una fábrica sin unión. Los trabajadores ocuparon la fábrica durante una semana el pasado diciembre. Lograron obtener la paga que se le debía y otros beneficios pero no fueron capaces de parar el cierre de la fábrica. Pero el mero acto valiente de ocupar la planta electrificó la imaginación de los trabajadores a través de los EE.UU. y aun internacionalmente (ver Lecciones de la Ocupación de la Fabrica Republic Windows para nuestra declaración completa sobre la lucha en Republic Windows).
Desde entonces sus acciones han sido vistas como modelo para otras luchas incluyendo la de Stella D’oro. El aumento de ocupaciones de fabricas y huelgas para luchar contra las cesantías y cierres ya es un fenómeno internacional. En el caso de Chicago, los trabajadores de la Republic no lograron la victoria sólida que hubiesen obtenido si hubiesen tenido un apoyo sindical más amplio organizado de antemano. En el presente, esos trabajadores se suponen que sean re-empleados por los nuevos dueños de la planta pero hasta ahora solo 15 han sido restituidos.
Las ocupaciones de fábricas y otras tácticas militantes para luchar contra la patronal serán más necesarias en el futuro cercano por mayores masas de trabajadores en los EE.UU. Trabajadores que nunca han soñado con estar activos se encontraran involucrados en fuertes batallas de clase. La lucha de la Republic Windows se podía haber utilizado como el comienzo para desatar una lucha mayor y a un nivel proletario mas elevado – ahora los trabajadores de Stella D’oro encaran ese reto y responsabilidad.
Como respuesta a la seria amenaza del cierre de la planta por la Brynwood, la Local 50 solicitó un interdicto de la JNRT destinado a parar la venta por lo menos de manera temporera. Nadie puede saber de que manera exacta cuando y como ese interdicto se va a llevar acabo. Pero de nuevo los trabajadores no pueden depender de la JNRT; como institución capitalista está fundamentalmente del lado del sistema de propiedad privada y de la producción de ganancias. Lo mismo se puede decir de los partidos Demócrata y Republicano. Estos grandes partidos capitalistas en sus raíces son inherentemente antiobreros. Sin embargo otra rama de los dirigentes sindicales que comparte la estrategia fallida, y no únicamente los de la Stella D’oro, sino de todo el movimiento obrero y durante muchas décadas, apoya a los políticos del Partido Demócrata. Los Demócratas se supone que sean los “amigos de la clase trabajadora”. La dependencia en las cortes capitalistas y el otorgarle apoyo a los políticos del Partido Demócrata ya ha conducido a décadas de recortes, cesantías en masa, y consecuentemente en el debilitamiento dramático de las uniones—aun antes de los recientes golpes drásticos a la economía.
En el caso de Stella D’oro, políticos locales proclaman que apoyan la lucha; estos deberían ser retado a llevar acabo mas que promesas. Cuando llegue el momento decisivo, ¿permitirán los políticos del Partido Demócrata que se cierre la Stella D’oro o tomaran cualquier acción necesaria para mantenerla abierta?
Parte de la respuesta se puede buscar en la pagina cibernética de la unión que contiene una pagina especial para la Stella D’oro (stelladorostrike2008.com). La unión adelantó en un articulo en el mes de julio (“La galletas se desmoronan en la planta de Stella: los ex-huelguistas y los políticos están esperanzados en evitar que la compañía se deshaga de las facilidades”, Mike Jaccarino, 14 de Julio) que exclamo, “Los oficiales locales corren para convencer a los dueños de la fabrica… a que reconsideren su decisión de cerrar. ‘Ahora mismo, el plan a corto plazo consiste en extendernos hasta Brynwood y tratar de convencerlos a que permanezcan’, dijo John DeSio, portavoz del presidente del condado Ruben Diaz”.
Pero mas tarde el artículo señala a la vez “DeSio dijo que si la planta cierra, ‘Nosotros tenemos programas como adiestramiento de empleo y desarrollo de la fuerza de trabajo aquí y en el Desarrollo Económico General del Bronx’. De seguro Diaz y el resto de los políticos están listos para darse por vencidos.La mayoría del tiempo los políticos del Partido Demócrata traicionan sus promesas a los trabajadores tan fácil como respiran.
Pero los trabajadores pueden prepararse para lanzar seria demandas contra los políticos que los pueden obligar a tomar acciones. Los trabajadores deben considerar seriamente una demanda táctica contra estos políticos que reclaman apoyar nuestro bando sobre el inminente cierre de la planta. Los trabajadores pueden demandar que estos políticos hagan un llamado a que el gobierno municipal tome la planta, en vez de permitir su cierre. Bajo situaciones de grandes presiones, los políticos capitalistas a todos los niveles pueden ser obligados a implantar medidas que por lo menos beneficien a los trabajadores. Pero sus motivaciones son siempre calmar las cosas. Desean aplastar las acciones independientes de la clase trabajadora y ciertamente no desean proveer soluciones duraderas que impactarían la producción de ganancias.
La dependencia en las instituciones capitalistas como la JNRT y el apoyo a los partidos capitalistas como los Republicanos y Demócratas es una estrategia perdedora para los trabajadores. Sin embargo los trabajadores están en lo correcto al buscar una solución política. Los trabajadores también están en lo correcto en desear que el gobierno les defienda sus empleos y otros derechos y no únicamente a nivel local. Muy claramente los ataques contra los derechos obreros en la Stella D’oro son parte de la catástrofe general que encaran los trabajadores – entonces llevar acabo una lucha común contra los cierres de las plantas y cesantías en masa a nivel nacional tiene mucho sentido. Han acaparado la atención nacional de los medios de comunicación masiva y otros medios de atención pública.
Un ejemplo reducido de esto seria – la BCTGM Labor News reportó que el representante Elliot Engel hizo una declaración recientemente en el piso de la Cámara de Representantes haciendo un llamado a los Brynwood Partners a “parar esta locura” en referencia a su amenaza de cerrar la planta.
Los trabajadores de Stella D’oro ahora tienen que estar conscientes de su oportunidad para impactar la conciencia nacional y utilizarla de la manera política mas eficiente. La mejor manera de difundir la lucha de Stella D’oro lo mas lejos y amplio posible seria proponer una demanda común que permita agrupar a los trabajadores a través del país. Bajo la superficie muchos trabajadores, unionados y no-unionados, inmigrantes y nativos, buscan por todas partes la manera de luchar y desquitarse contra condiciones empeorantes. Los trabajadores de Stella D’oro que ya ven la necesidad de llevar la lucha mas allá del Bronx y Nueva York deberán unirse con nosotros en la promoción de una campaña por la nacionalización de las industrias fallidas y rompe gremios.
El año pasado, los trabajadores a través del país estuvieron muy atentos al presidente Obama cuando llevo acabo los rescates de las corporaciones. Una vez en el poder, su nueva administración prosiguió a ser mas en su afán por rescatar a la patronal. Los trabajadores a través del país ahora se enfurecen aun mas al pasar el tiempo y aumentar el desempleo sin un fin a la vista. Una demanda de que la administración Obama nacionalice a las industrias fallidas y rompe gremios encontraría apoyo entre la clase trabajadora. Si tal apoyo seria capaz de desatar una lucha y desquite mas amplio a corto plazo no se puede predecir sin llevarla acabo. Pero de cualquier modo, si los trabajadores de Stella D’oro son capaces de ampliar su lucha contra el cierre en el Bronx hasta alcanzar una posición publica a favor de la nacionalización de todas las industrias fallidas y rompe gremios, le estarían demostrando a otros trabajadores la vía a seguir para luchar y desquitarse – lucha esta que es tan desesperadamente necesaria. Seria un avance real y muy necesario para adelantar la causa de la clase trabajadora.
Más tarde o más temprano, se desataran grandes luchas. Cuando ocurran estas luchas, será necesario luchar no solamente contra los patronos capitalistas sino contra los políticos capitalistas y los burócratas sindicales que los apoyan, e inevitablemente conspiran para contener las luchas bajo su control contrario a los mejores intereses de la clase trabajadora. Es por esta razón que mientras en el presente los trabajadores hacen demandas de sus dirigentes sindicales y hasta de los supuestos “amigos de la clase trabajadora” dentro del Partido Demócrata, los trabajadores deben tratar de encontrar una visión y dirección política alterna que no los traicione como inevitablemente lo hacen los políticos capitalistas y dirigentes obreros.
De hecho, la patronal y los políticos capitalistas son realmente responsables por la crisis económica debido a que defienden a un sistema bajo el cual tales crisis son inevitables. Y los dirigentes sindicales son profundamente responsables por estar de acuerdo con ellos y evitar que la clase trabajadora encuentre su camino independiente. Y se pondrá peor. Las crisis económicas no son únicamente inevitables mientras exista el capitalismo: en el presente, el sistema se encuentra en una decadencia profunda que una total depresión no podrá ser evitada por mucho tiempo. Por lo tanto, nosotros de la League for the Revolutionary Party argüimos abiertamente a favor del socialismo revolucionario como la única alternativa a un desolado futuro capitalismo.
Las políticas y demandas que apoyamos para la lucha de Stella D’oro pueden conducir a la victoria si son adoptadas. Sin embargo, como trabajadores socialistas revolucionarios también estamos esperanzados en convencer a los compañeros trabajadores de la necesidad de una revolución socialista. Es posible lograr las demandas a favor de la nacionalización para salvar empleos e industrias completas bajo el capitalismo. Aunque esas victorias serán importantes, las nacionalizaciones bajo el capitalismo no representan las soluciones a largo plazo que necesitamos. Las fábricas nacionalizadas todavía funcionarían bajo el sistema de ganancias capitalista rompe cuellos. Y el gobierno y estado capitalista siempre estarían buscando avanzar los intereses de la patronal contra los trabajadores. Pero mediante grandes luchas como la lucha a favor de las nacionalizaciones, los trabajadores pueden obtener un mejor sentido de su propias fuerzas de clase. Aprenderán mediante sus propias experiencias un tanto más sobre la naturaleza y las severas limitaciones del sistema bajo el cual vivimos.
El potencial de las industrias nacionalizadas para no solamente salvar los empleos sino también para planificar la producción a los intereses de las mas amplias masas de gente se puede realizar únicamente cuando se derroque al capitalismo. Será necesaria una toma revolucionaria del poder estatal por la clase trabajadora y sus aliados para llevar acabo y hacer posible la total transición a una economía planificada. El estado capitalista deberá ser reemplazado por un estado obrero que será capaz de llevar acabo una amplia cantidad de medidas destinadas a transformar la sociedad y construir el socialismo. Si no deseamos la depresión económica, el racismo, las cesantías en masa y las guerras que son inherentes al capitalismo imperialista, tendremos que luchar a favor de la revolución socialista. El socialismo genuino proveerá paz y prosperidad para todos y representa lo opuesto a la vida bajo el capitalismo que se basa en la explotación de la clase trabajadora por la clase dominante – y de igual manera del dominio imperialista sobre las naciones oprimidas. Para ser posible el futuro socialista, le exhortamos a los trabajadores y a la juventud que ya se oponen al capitalismo a que ahora se unan a nosotros. Tenemos que construir los comienzos de la dirección del partido revolucionario que nuestra clase necesita.